Y Abraham volvió a decir:
"no se enoje mi Señor,
quizás no sean más que diez".
Y el Señor Yahvéh respondió:
"No destruiré Sodoma,
por amor de esos diez justos".
(Génesis 18)
Los antecedentes o background de esta base de datos se remontan al año 1987, en que, en un lentísimo ordenador Amstrad , casi sin disco duro, además de recopilar todos los State of the art del American Review of Respiratory Diseases, se me ocurrió empezar a teclear en el programa dbase III Plus, las referencias bibliográficas de todos los artículos publicados en la Revista que difunde el buen hacer de los intensivistas españoles. El pasado enero de 2005 se han cumplido 28 años de la aparición en enero de 1977 del Volumen cero, Número cero, de la Revista Medicina Intensiva, y 15 años desde la publicación en esta revista, en 1990, de un artículo1 en el que aparte de la oferta al Director de la Revista, a su Redactor Jefe el Dr. Soler, que siempre apoyó la idea, a los Presidentes de la SEMIUC, a la Editorial Doyma, etc., personalmente me comprometía a enviar por correo -no electrónico entonces- la base de datos a los interesados. En los años 1990-91, recibí unas 20 peticiones de dicha base, del entorno peninsular e insular, que cumplidamente se enviaron contra reembolso en disquete de 31/2 pulgadas, a gastos debidos de 500 pts (3 euros de ahora).
Durante los años noventa, y ahora en los 2000, con la ayuda de mi hija Carolina, "en una especie de empresa familiar sin ánimo de lucro", hemos continuado volcando todos los títulos de lo publicado en la Revista, en dbase III Plus, base importable desde otros programas, QPRO, Lotus, Excel, con la única excepción de los abstract y comunicaciones a las Reuniones Anuales de la Sociedad Española (SEMIUC y SEMICYUC) al entender que no siempre son trabajos definitivos. A partir de mayo de 1993, la revista está incluida en Embase/Excerpta Médica, lo cual hubiera sido definitivo de contar este sistema con soporte informático disponible y mayor difusión en el país.
Desde 1999 podemos disponer gracias a la colaboración entre la empresa AstraZeneca, y la editorial Doyma, de un CD anual con todos los artículos publicados desde 1999 hasta 2001, en el CD inicial y al año siguiente hasta el 2002, a texto completo en formato "pdf", perfectamente imprimibles.
Al principio del verano de 2004, AstraZeneca empezó a distribuir a todos los intensivistas el CD anual (1999-2003 a texto completo) añadiéndose en el mismo la recopilación completa que les proporcioné de las citas bibliográficas de la Revista (1977, Volumen cero, Número cero hasta el 2003, Volumen 27, Número 10) con sus motores de búsquedas. Comprende más de 2.500 citas bibliográficas, expresión del histórico de la Revista Medicina Intensiva, incluyendo fechas y lugares de las reuniones de la SEMIUC, SEMICYUC y MIR, como recuerdo, sin inclusión de abstract y trabajos no definitivos.
Tengo que confesar, que tras la rigurosa distribución del CD que me consta ha hecho el personal de AstraZeneca, esperaba alguna muestra del eco producido en la sociedad intensivista española ante la disponibilidad de esta recopilación bibliográfica de nuestra producción científica en todos estos años, y que el buscador Google no recoge. La edad que nos pasa nos ratifica "la imposibilidad de ser profetas en la propia tierra" como atestigua alguna minúscula referencia de reconocimiento recibida en el ámbito local, pero con esto se contaba. A nivel nacional, sólo me llegó en el año que ha pasado un correo del Director de la Revista, Dr. Miguel Ángel de la Cal, invitándome a escribir el editorial que estás leyendo, para los que... ni han desenvuelto el CD pasado. En el que se está distribuyendo este año con el 2004 completo, se han hecho algunas mejoras en el aspecto de las pantallas, con información de ayuda para las búsquedas, con las limitaciones que impone el Acrobat Reader para algunos temas: vídeos inversos, impresiones, etc.
La tendencia de los especialistas españoles, desgraciadamente tan inclinados a consultar la bibliografía anglófila, con escasas citas bibliográficas en español en nuestras publicaciones2, podría deberse en parte al desconocimiento de lo publicado en nuestro país, por lo que creo, que el tener "a mano" un soporte informático de las citas bibliográficas completas de la revista podría salvar estas carencias. No sé si es un gran trabajo, pero os aseguro que es un trabajo grande y que es un placer ofrecerlo a todos los especialistas de habla hispana, pidiendo disculpas por las erratas u omisiones, que "como las otras..., haberlas, habráilas". Y como ante cualquier hecho humano, la respuesta casi siempre se encuentra en la sabiduría de la Biblia, he recurrido a ella, al principio de estas líneas, salvando por supuesto la distancia. Parafraseando la cita bíblica, me atrevería a decir: "con que haya diez intensivistas que alguna vez consulten en el CD la recopilación bibliográfica, quizá haya valido la pena el trabajo de recoger toda esta información, trabajo que lo único que pretendía era difundir en nuestra hermosa lengua las publicaciones sobre nuestra también hermosa especialidad".