Sr. Director:
Agradecemos los comentarios realizados por Rodríguez A et al sobre la capnografía y la calorimetría indirecta. Evidentemente la capnografía es una ténica de monitorización cuya utilidad en el enfermo crítico es indiscutible y cuyas aplicaciones se encuentran en expansión1, por lo que su introducción en la unidad de cuidados intensivos (UCI) se ha generalizado. Su utilización para la predicción de los cambios de la PaCO2 en pacientes críticos no es novedosa, siendo nuestros resultados incluso mejores que los referidos por otros autores; hay que recordar que en determinados estudios los resultados indicaban de forma errónea no sólo la cuantía, sino también la dirección del cambio en la PaCO2.
La calorimetría indirecta es otra técnica de monitorización que, aunque de mayor coste, aporta datos fundamentales para el correcto abordaje metabólico del paciente crítico. Su aplicación en la monitorización respiratoria en dichos pacientes tampoco es novedosa, aunque sí lo es su utilización en la predicción de los nuevos valores de PaCO2. Los resultados obtenidos en nuestro estudio superan a los valores conseguidos con la capnografía (r = 0,93 frente a 0,55) y permiten conocer los nuevos valores de PaCO2 en el minuto siguiente al cambio ventilatorio: efectivamente, el nuevo equilibrio ventilatorio se retrasa entre 45 y 74 min2, tiempo que habría que esperar para obtener una gasometría arterial (ténica gold standard hasta el momento). Su incorporación en los nuevos ventiladores permitiría, mediante un adecuado software, la monitorización continua de la PaCO2 en pacientes críticos, con indiscutibles ventajas.
Por supuesto, una técnica no sustituye a la otra (los parámetros que determinan son diferentes: presión de CO2 frente a ml/min de CO2 eliminado), ambas poseen unas indicaciones precisas y no creemos que intentar ampliar las utilidades prácticas de dos técnicas ya introducidas en las UCI se pueda considerar una "utilización inadecuada", sino simplemente un estudio de investigación que comportaría menor agresión tecnológica para un paciente grave.