La radiografía es el principal método para confirmar la colocación del catéter venoso central y descartar complicaciones. La ecografía es una alternativa en los cuidados intensivos, con una disminución de la radiación, tiempo de confirmación y costes. La correcta colocación en la vena cava superior se realiza con la visualización de la guía o el catéter, o el signo de la turbulencia auricular rápida, en un plano subxifoideo o apical (fig. 1). El signo de la turbulencia auricular rápida corresponde a la visualización de un flujo turbulento en la aurícula derecha tras la inyección rápida de suero salino agitado por el puerto distal (fig. 2, Vídeo 1). Un tiempo superior a 2s indica un mal posicionamiento; en cambio, si aparece en menos de 2s, la punta está bien colocada y el catéter puede emplearse inmediatamente. No obstante, para descartar otras complicaciones como el neumotórax, es necesario realizar una radiografía o una ecografía torácica.
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